25 ene 2010

Haití: de cero a IDE en una semana

A no ser que uno viva debajo de una piedra, sabe que en Haití ha habido un terremoto, con periodistas sacando fotos a los niños que sacan de los escombros incluídos. Un terremoto afecta a todas las infraestructuras: vías de comunicación, redes de energía, agua potable y residual, y telecomunicaciones.

Además, una catástrofe natural de esta magnitud afecta también a la infraestructura de las infraestructuras: la información geográfica. Un ejemplo notable es el paso del huracán Katrina por el puente de la bahía de Saint Loius de la I-90:
No sólo quedó destruído el puente, sino que también quedó invalidada y obsoleta toda la cartografía de vías de comunicación. Esto tuvo un gran impacto negativo en la atención humanitaria posterior, puesto que los equipos de emergencia y los convoys de suministros dependían de mapas en los que ese puente existía. De hecho, Jeese Robins, bombero y paramédico, nos cuenta que la Cruz Roja creía que ese puente existía porque "lo estamos viendo ahora mismo en Google Maps" (sic). Esto, como es de esperar, ocasionó innumerables retrasos a los convoys de suministros, y se añadió a la ya caótica situación de entonces.

Sin embargo, si nos centramos en la imagen global, las catástrofes naturales y humanitarias se sucenden con cierta frecuencia. Estudiando el comportamiento de la respuesta humanitaria, y del uso que ésta hace de las nuevas tecnologías, ha sido posible definir un patrón de innovación tecnológica para desastres:
  • Desastre

  • Adaptación ad-hoc

  • Liderazgo del campeón

  • Mejora iterativa

Cuando ocurre un evento que precisa de ayuda humanitaria, se aplican nuevas tecnologías ad hoc: esto es, se usa la tecnología que los cooperantes individuales conocen de antemano, sin saber realmente si está probada, o si va a funcionar bien, porque necesitan algo que funcione, y que funcione ya. De entre todas las tecnologías que se introducen, habrá algunas que funcionen mejor, y ayuden, y otras que funcionen peor, y estorben. Las tecnologías que funcionen mejor (los campeones) sufrirán mejoras, modificaciones, o crearán nuevas tecnologías derivadas, mientras que las perdedoras no. Y se repite el ciclo.

Durante los días inmediatamente posteriores al terremoto de Haití que nos ocupa estos días han sucedido varias cosas.

Por un lado, GeoEye, DigitalGlobe, JAXA y otros han liberado completamente imágenes satélite de alta resolución, para cualquier uso (sólo es necesario mencionar la autoría). Unas horas después, esas imágenes estaban replicadas, cacheadas, georreferenciadas, proyectadas, teseladas y siendo servidas a través de múltiples servidores WMS.

Por otro lado, están los OpenStreetMaperos. Estas personas, que normalmente levantan cartografía de su propia zona, al saber que había ortofotos de Haití, se lanzaron a digitalizar tanto calles como edificios en ruinas. En un tiempo récord se logró levantar un callejero completo de Puerto Príncipe y alrededores, y a su vez, una estimación de edificios derruídos. Y esto es gracias a la falta de una ontología estricta, que ha permitido definir "edificio derruído por terremoto" y "campamento de refugiados" instantáneamente.

Y, por otro lado, están los ficheros para GPS Garmin que se generan automáticamente a partir de los datos de OSM. Visto el desarrollo de los datos de Haití, los responsables del servicio decidieron aumentar la frecuencia del servicio para los ficheros de este país: de una semana a cinco minutos.

Y aquí es donde entran en escena los equipos de búsqueda y rescate (léase "bomberos" desplazados voluntariamente a Puerto Príncipe). Muchos de estos equipos usan unidades GPS en sus actividades de búsqueda y rescate, pero se encuentran con que Haití, al ser el país más pobre de las américas, no está cubierto ni por TeleAtlas, ni por NavTeq, ni por nadie. Hasta que descubren los ficheros con la información de OpenStreetMap.

Unos días después, el Equipo de Búsqueda y Rescate Urbano del Condado de Fairfax (Virgina, EEUU) nos relata desde Puerto Príncipe:
«Most of our team members own their own Garmin Rino and 60CSx units on top of the units we already have in the cache. Having these detailed maps on our GPS units is a big deal. Shortly after discovering your work I quickly spread the word and transferred the street level maps onto as many Garmin units as we could before sending the American rescue teams on the streets. The team members are thrilled to have this resource you have created. I wish you could see their faces 'light up' when I take their GPS unit and tell them that I'm going to give them street level detail maps. They have been working VERY hard and anything that can help them in every aspect of their mission here is greatly appreciated.»
«La mayoría de miembros de nuestro equipo tiene sus propias unidades Garmin Rino y 60CSx, aparte de las inventariadas. El tener mapas detallados en estas unidades GPS es muy importante. Justo después de descubrir vuestro trabajo [el de OSM], corrí la voz y copié los mapas callejeros a tantas unidades como pude, antes de enviar a las calles a los equipos de rescate estadounidenses.Los miembros del equipo están encantados de tener este recurso que habéis creado. Desearía que pudiérais ver cómo sus caras se iluminaron cuando cogí sus unidades GPS y les dije que les iba a poner mapas a nivel de calle. Han estado trabajando MUY duro y cualquier cosa que les ayude en cualquier aspecto de su misión se agradece enormemente.»


OpenStreetMap ha funcionado impresionantemente bien durante esta catástrofe.
Los datos están siendo usados por UNOSAT,GDACS,el Centro de Investigación Europeo, la Dirección de Gestión del Riesgo de Colombia, MapAction,Ushahidi, Flickr,ITHACA, y otros.

Incluso ESRI reconoce públicamente que OpenStreetMap existe, mediante las instrucciones de su extensión de interoperabilidad con OSM. Incluso hay IDEs basadas únicamente en servicios OGC (WFS, WMS) gracias a CubeWerx y Carbon Project.

Ahora mismo no es el momento de hacer un censo completo de todos los organismos que están utilizando estos datos. Los expertos en cuestiones cartográficas, los autodenominados CrisisMappers, se reúnen en eventos denominados CrisisCamps precisamente para discutir
qué tecnologías han funcionado, cuáles no, y cómo prepararse para responder
mejor a posteriores crisis.

También está la cuestión de la rivalidad entre Google MapMaker y OpenStreetMap. Google permite la descarga de información geográfica de MapMaker, pero ¿porqué no se ha usado esta IG para confeccionar los mapas?

La respuesta viene de la mano de otra cuestión ya conocida. El sempiterno problema de las licencias no comerciales. Y para explicarlo no voy a recurrir a la Prueba de la Tarta, sino a la Prueba del Helicóptero:

Supongamos el siguiente escenario: hay una catástrofe humanitaria, y que Médicos Sin Fronteras está montando un hospital hinchable. Para hacerlo, necesita trasladar a cuatro médicos y doce toneladas de material en un helicóptero de transporte (por ejemplo, un Boeing CH-47 Chinook como los que usa el Ejército de Tierra).

Pero, como suele ser normal en una catástrofe, los helicópteros militares no dan abasto. Médicos Sin Fronteras se ve obligada a alquilar un vuelo con un Boeing 234 (que es la versión civil del Chinook) a una empresa privada; para eso tienen el dinero de las donaciones. El piloto no puede usar las cartas de navegación aéreas ya existentes: la catástrofe las ha invalidado, pero hay mapas que muestran helipuertos temporales y puntos de abastecimiento de combustible.

La pregunta es: ¿Ese piloto (que, recordemos, es un piloto comercial en un vuelo alquilado) puede utilizar estos mapas? La misma situación sería aplicable a otros medios de transporte (carretera, marítimo). En cualquier caso el fin es humanitario, altruista y no comercial, pero los medios son comerciales. Si los mapas no permiten ningún tipo de uso comercial, es muy probable que sea ilegal usarlos para este tipo de transportes.

En casos de catástrofes naturales o crisis humanitarias, los equipos de respuesta quieren cosas que funcionen, y que funcionen ya. Eso incluye a los mapas: quiero mapas actualizados, y quiero las actualizaciones ya. Las personas encargadas de hacer esos mapas, por su parte, quieren que esos mapas sirvan para después, y no haya problemas de compatibilidad o de índole legal.
Las cuestiones de cómo la cartografía puede y debe ayudar en estos casos son dignas de ser discutidas en profundidad.

Y, todo sea dicho: el saber que pasar dos horas haciendo algo tan aburrido como es una conflacción de vías, o comprobar que la línea de costa sigue estando cerrada, sirve para ayudar a los equipos de emergencia, deja un muy buen sabor de boca.

Publicado por Iván Sánchez Ortega
OpenStreetMap España

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enhorabuena a Iván y a OSM por la labor que estáis haciendo. Fantástico.

Podría ser una línea de trabajo muy interesante para la IDE de UN (UNSDI).

Un saludo

Antonio F. Rodríguez